Monterrey, N.L .(www.lmb.com.mx / Leopoldo Ramírez Quezada).- Una noche de gala, recuerdos y leyendas se vivió durante la ceremonia de entronización de la clase 2023 del Salón de la Fama del Beisbol Mexicano.
Con la llegada de Alfredo Harp Helú, Luis Arredondo, Javier Robles, Roberto Vizcarra, Juan Gabriel Castro, Alejo Ahumada, Jesús Moreno, Tomás Herrera y Noé Muñoz, el número de figuras que viven en el recinto de los inmortales se eleva a 216.
Francisco Padilla, Director del Salón de la Fama del Beisbol Mexicano, le dio la bienvenida a la clase 2023.
“El recinto de los inmortales los recibe con los brazos abiertos. Para siempre los aficionados los recordarán al ver sus placas. Bienvenidos a la que será su casa toda la eternidad”.
El primero en recibir su placa fue ‘El Sargento Metralla’ Tomás Herrera. Su hijo, Tomás Herrera Jr. estuvo en representación de su padre, fallecido en 2016.
“Mi padre fue militar del ejército de los Estados Unidos, en donde obtuvo el rango de sargento —recordó Herrera Jr.—, su carácter lo llevó a tener muchos enfrentamientos con umpires y rivales. Papá, hoy ingresas al Salón de la Fama para convertirte en inmortal. Te mando un abrazo al cielo”.
El popular ‘Sargento Metralla’ se apuntó 894 victorias en su carrera como manager y llevó a los Diablos Rojos a los títulos de 1964 y 1968.
Luego llegó el turno de recibir su placa a Jesús ‘Chuy’ Moreno, serpentinero derecho que brilló en la LMB en los años 80 y 90. Su dominio en la lomita de las responsabilidades lo llevó a ganar 10 o más juegos en 11 .
“Gracias de todo corazón a toda mi familia. Siempre conté con su apoyo y este logro es compartido”.
Alejo Ahumada fue uno de los lanzadores más dominantes del beisbol mexicano en la década de los años 70. Lanzó 149 juegos completos y 35 blanqueadas en la Liga Mexicana de Beisbol.
“Durante toda mi carrera sólo he recibido trato amable en el mundo del beisbol, le agradezco a este deporte tantas amistades”.
Tocó el turno de transitar rumbo a la inmortalidad a Juan Gabriel Castro. El popular ‘Guaguel’ disputó 1,103 juegos en su carrera de 17 temporadas en las Ligas Mayores.
“Gracias al Salón de la Fama por preservar las hazañas de las grandes figuras del beisbol. Gracias a mi familia por ser parte tan importante de mi vida. Este día es el reflejo de todo el trabajo y la pasión que me caracterizó como pelotero”.
Noé Muñoz, al grito por “Noé Noé Noéeee” por parte de sus familiares presentes en la ceremonia, se convierte en el décimo receptor que alcanza la inmortalidad. Jugó 24 temporadas en la Liga Mexicana de Beisbol con Industriales, Diablos Rojos, Broncos y Saraperos. Fue parte del bicampeonato de la Nave Verde en 2009 y 2010.
“Saber que mi nombre será parte de la historia del beisbol mexicano para toda la eternidad me llena de orgullo. Estar en el Salón de la Fama es un regalo que atesoro desde ahora en mi corazón”.
Javier Robles, campeón cuatro ocasiones con los Tigres, contó una anécdota de su infancia en la que estuvo a punto de abandonar el beisbol luego de haber sido rechazado tres veces en tryouts. Su padre y su hermano fueron clave para que continuara y gracias a ellos, el éxito llegó a su carrera. Cerró su discurso diciendo “gracias beisbol porque me lo has dado todo”.
Roberto ‘Chapo’ Vizcarra jugó durante 23 campañas en la Liga Mexicana de Beisbol y fue campeón con tres distintos equipos. Lideró la LMB en dobletes en 1991 con 49, cifra con la que empató el récord de más hits dobles conectados en una temporada.
“Me siento bendecido por vivir este momento. Así se cumplen todas mis metas en el mundo del beisbol”.
Luis ‘Rayo’ Arredondo, el máximo robador de bases en la historia de la Liga Mexicana de Beisbol con 527 estafas, afirmó que “cuando yo jugué siempre lo hice con el corazón. Sólo me queda agradecer a todos los que me ayudaron a llegar aquí”.
Alfredo Harp Helú. empresario y filántropo que llegó a la Liga Mexicana de Beisbol en 1994 al adquirir la franquicia de los Diablos Rojos del México, finalizó la tanda de nuevos inmortales.
“El lema de mi vida es vivir y morir jugando beisbol. Es mi gran pasión desde niño y hoy es un día memorable”.
De esta manera se encendieron por primera ocasión los nichos de las nueve leyendas que conformar la clase 2023 de entronizados al Salón de la Fama del Beisbol Mexicano, recinto que resguarda el pasado de la pelota caliente y promueve que las nuevas generaciones se acerquen a él.